Innovaciones energia solar

Las innovaciones solares que están por venir y aportarán cambios

No solo están inventadas ya las placas solares domésticas del tamaño de una teja, los cargadores solares de coches eléctricos, las placas que alimentan luminarias, semáforos, termos de agua, sino que se pueden comprar fácilmente cocinas y duchas solares domésticas, cargadores, y mochilas solares con los que recargar el móvil, la tablet, y el ordenador, un invento que está dejando su huella en nuestro cuerpo.

ALGO NUEVO BAJO EL SOL

Hace unos años hubo un boom de productos a los que se le aplicó la energía solar. Muchos se han hecho un hueco en el mercado y los consumidores aprovechan sus virtudes. A menudo, el interés viene motivado por criterios ecológicos, pero un aparato solar solo se mantiene en el mercado si su funcionamiento es práctico y útil.

Los que menos convencen son las soluciones sencillas que requieren de mucha energía para su funcionamiento constante (como la radio solar), o que hay que cargarlos constantemente, como un reloj con energía solar como única fuente. Los que más son los cargadores portátiles de gran capacidad para teléfonos, tabletas u ordenadores portátiles y las luces solares de exterior. Los cargadores proporcionan energía para pequeños dispositivos en zonas de difícil acceso a la energía eléctrica, es más cómodo y rápido que una carga a través de un enchufe.

MÁS DE LO QUE PUDIERA PARECER

El sol también da de comer. Las cocinas solares parabólicas de 140 centímetros de diámetro aportan 600 vatios y permiten cocinar a 200 grados centígrados. Se puede preparar una paella para 25 comensales en solo un 20% más de tiempo que con una cocina de gas. Y también son útiles en proyectos de cooperación internacional.

Como esta, hay una infinidad de productos que pueden surgir en el mercado en un futuro y que provoquen un cambio en nuestras formas de vida así como un cambio en nuestra manera de tratar al medio ambiente.

Para saber más acerca de las novedades en energía solar pincha aquí:

https://elpais.com/elpais/2019/02/27/buenavida/1551289620_480136.html